Plegaria



Aunque te sea imposible orar debes esforzarte y decir las palabras con absoluta simpleza - como si fueras un niño en la escuela. Debes decirlas tal cual, sin ninguna sofisticación. Di unas pocas palabras y trata simplemente de escuchar lo que estás diciendo y prestarle atención a la frase. Concentra tus pensamientos de modo que nada externo te distraiga. Todos los pensamientos deben estar centrados en las palabras de la plegaria. Debes recorrer la plegaria de una manera ordenada hasta que finalmente te sientas inspirado y seas capaz de orar con una gran pasión y anhelo. Pero no debe intentarse hacer una prueba con esto.

Rebe Najmán de Breslov 

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